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Sobre Vosotros
¡Aquí encontrarás las historias de los dueños y lo que esconden algunos de sus coches más míticos para la historia del rally!
Joan Puig
RENAULT 5 MAXI TURBO – GRUPO B
Joan Puig siempre había soñado con revivir la época dorada de los rallies del Grupo B. Desde que era un niño, se maravillaba con los poderosos motores rugiendo en las pistas de tierra y asfalto, especialmente con el icónico Renault R5 Maxi Turbo. Este sueño cobró vida cuando heredó un viejo Renault R5 de su abuelo, un modelo desgastado, pero lleno de potencial.
Decidido a hacer realidad su sueño, Joan se embarcó en un ambicioso proyecto de restauración. Invirtió horas interminables investigando y buscando piezas originales para transformar su modesto Renault R5 en una réplica del legendario Maxi Turbo del Grupo B.
Cada noche, después de un largo día de trabajo, Joan se sumergía en su garaje, rodeado de herramientas y piezas dispersas. Con paciencia y determinación, desmontó cada parte del automóvil, reemplazando lo gastado por componentes nuevos y auténticos del R5 Maxi Turbo. Cada tornillo, cada detalle, estaba imbuido con el espíritu de los rallies de antaño.
Después de años de trabajo y superar numerosos obstáculos, Joan vio su visión cobrar vida cuando encendió el motor restaurado del Renault R5 Maxi Turbo. La emoción inundó su ser mientras imaginaba las emocionantes carreras del Grupo B. Con el automóvil listo, Joan llevó su creación a las carreteras locales, donde destacaba entre la multitud, recordando la época dorada de los rallies y demostrando su dedicación al automovilismo.
Antonio Fernández
Lancia Stratos HF – Grupo 4
Antonio Fernández era un apasionado de los rallies desde que era un niño. Su fascinación por los autos veloces y la emoción de las competiciones lo llevó a perseguir un sueño: restaurar un Lancia Stratos HF del Grupo 4, un ícono de la era dorada de los rallies.
A lo largo de los años, Antonio buscó incansablemente un Stratos que pudiera resucitar. Finalmente, encontró uno en un estado lamentable, escondido en un cobertizo polvoriento. A pesar de su estado deplorable, Antonio vio el potencial en el automóvil y se comprometió a devolverlo a su antigua gloria.
Los meses pasaron mientras Antonio trabajaba con meticulosidad y pasión en su proyecto de restauración. Cada detalle del Stratos recibía cuidado y atención, desde el motor hasta el chasis y la pintura. Con cada tornillo apretado y cada pieza restaurada, el automóvil comenzaba a recuperar su antiguo esplendor.
Finalmente, el día esperado llegó. Antonio encendió el motor del Stratos restaurado y el sonido atronador llenó su garaje. La emoción lo invadió mientras recordaba las hazañas legendarias de este automóvil en los rallies de antaño. Con su Lancia Stratos HF del Grupo 4 listo para la acción, Antonio no pudo esperar para probarlo en las carreteras. Cada curva y cada recta eran una reminiscencia de los días de gloria del automovilismo, y Antonio se sentía como si estuviera viviendo un sueño hecho realidad. Su restauración fue un tributo al legado del Stratos y al Grupo 4 de rallies, y demostró el amor y la dedicación de Antonio por el mundo de los autos de competición.
María Gómez
Peugeot 205 T16 – Grupo B
María Gómez siempre había soñado con sentir la velocidad y la emoción de los rallies. Desde que era joven, admiraba los audaces movimientos de los pilotos y la potencia de los autos del Grupo B. Con determinación y ahorros meticulosos, finalmente pudo realizar su sueño al adquirir un Peugeot T16, el icónico auto del Grupo B.
María enfrentó el desafío de restaurar por completo el Peugeot T16 con determinación. Pasó meses investigando y buscando piezas originales para asegurar la autenticidad del automóvil. Con habilidad y paciencia, trabajó incansablemente en su garaje, desmontando y reconstruyendo cada componente. Finalmente, el día esperado llegó cuando encendió el motor restaurado del T16, llenándola de emoción al ver su sueño hecho realidad.
Con el T16 listo para la acción, María se lanzó a las carreteras locales. Cada curva, cada recta, era una nueva aventura llena de adrenalina y emoción. A medida que el Peugeot T16 rugía por las carreteras, María sentía una conexión profunda con el legado del Grupo B y una gratitud infinita por haber convertido su pasión en realidad.
Su restauración del Peugeot T16 no solo fue un logro personal, sino también un tributo al espíritu inquebrantable de los rallyes y la dedicación de María a su pasión por los autos y las carreras.